sábado, 23 de febrero de 2008

Otra vez...

El frio, la humedad, el aire y los fluidos que no quiero no mencionar y tampoco descubrir jugaban con sus zapatos, raudamente se movia hacia su pequeño departamento. No hacía un mes desde que esa voragine se transformo en su vida, lleno de amargura. Subio por las escaleras roidas por el tiempo, hasta llegar a una puerta muy desgastada... allí introdujo un objeto metalico, me atreveria a decir que es una llave, aunque extraña, parecia rota en algun lado. Por fin entro en su mundo...

Como penso y recordo, lo unico para beber era un jugo de hace dos días, el agua estaba sin pagar... la boleta deberia de estar en algún lado, quizás debajo de los cojines del sillon... lo único para comer era un mendrugo de pan, que sería su desayuno de mañana. Sin observar más su mísera vida, cerro la puerta, dejo su pesada carga en el sofá. Y dejo caer su peso en una silla, frente al computador...

Una vez más deberia de volver a crear su mundo, su correo y su fotolog, donde comunicaba a sus conocidos su estado de animo... ¿cuantos habia creado en lo que iba de la semana? 16... quizás... y hoy solo estaba a miercoles. Sin pensarlo dos veces, se desconecto del mundo real y creo su nueva cuenta...

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